Me temo que no hice una buena elección al incorporar al strigosus mini, me encapriché de él por su tamaño y su coloración tan morada propia de un ejemplar adulto, pero creo que el pez portaba algún tipo de parásito: Tenía algun pequeño bultito en la aleta dorsal y una de las pectorales, pero no le dí demasiada importancia al verle comer bien (ya he visto antes este tipo de bultos en algunos flavescens y nunca ha sido nada que afecte a la salud del pez).
Pero lo cierto es que desde que llego ha tenido un comportamiento muy nervioso, como si estuviera molesto por algo, y no he logrado hacerle engordar lo mas minimo a pesar de comer muchisimo (todos los dias acaba con la tripa gorda de tanto comer, pero el lomo sigue estando delgado).
El caso es que hace unos dias que empezó a rascarse y ha tener las aletas algo replegadas....y desde entonces he perdido 3-4 gobios, y lo peor de todo, hace un par de dias murió el Centropyge Lorículus que llevaba 3-4 años conmigo, dejó de comer sin mas sintomas externos de enfermedad que 3-4 puntos blancos en las aletas pectorales y a los pocos dias amanecio muerto.
Por si fuera poco, la perdida del Lorículus parece haber roto la paz reinante en el acuario, y hoy el Argi y el Strigosus han amanecido con las aletas desfilachadas: no paran de meterse caña....me temo que va a ser la puntilla para el Strigosus, que dicho sea de paso esta mas delgado que nunca.
Solo quería compartir esta experiencia con vosotros al igual que otras veces comparto los buenos momentos...esta afición es asi, y supongo que si no fuera por lo dificil que es tenerlo todo perfecto no nos engancharia tanto, jeje.
